Facebook Latitidine 40

Muebles online: todo sobre el mundo de los Muebles

¿Sofá o chaiselonge?, un cómodo dilema

Hasta no hace tantos años la imagen más habitual en las salas de estar era la de encontrarte con un sofá de tres plazas a juego con otro de dos alrededor de una mesa en el centro que convertía ese rincón en el lugar ideal para una sobremesa o un aperitivo previo a pasar al comedor. El paso del tiempo cambió los criterios decorativos y fue abriendo poco a poco las puertas de los hogares a las chaiselonges, unos sillones de una plaza que permiten estirarse y que no desentonan con el estilo que les rodean.

¿Cuál es la mejor opción? La batalla de estilos plantea ahora una pregunta de difícil respuesta: ¿Qué complementa mejor un salón, un sofá de dos plazas o una chaiselonge? Intentar razonar una respuesta se antoja complicado ya que los gustos, como en el caso de los colores, son de lo más variados.

ch3

Un sofá biplaza ofrece una solución para las visitas más cómoda y más práctica a la hora de una sobremesa. La posibilidad de que dos personas se puedan sentar sin molestias ni tener que forzar posturas permite al anfitrión ganar espacio. En el caso de las chaiseslonge, el anfitrión disfruta de un elemento estético poco habitual y, por ende, un toque de estilo personal que ofrece al visitante un salón distinto a lo que se ha encontrado habitualmente.

La idea de apostar por un sillón de este tipo, cuyo catálogo de posibilidades, estilos y modelos es muy grande, obedece más a criterios estéticos que prácticos ya que difícilmente ofrecerá un sitio en el que acomodarse a más de una persona. Además, la comodidad que ofrece al usuario para poder seguir una conversación se pone en tela de juicio. No sucede lo mismo si el uso que se le va a dar corresponde a la tan conocida y famosa siesta. Llegados a esta altura, una pregunta que podría contribuir a alcanzar una solución a la cuestión planteada al inicio es el uso que se le va a dar al mueble en cuestión. Si la habitación pretende ser un punto de reunión en el que el uso principal es la charla, un segundo sofá de dos plazas podría parecer la decisión más acertada aunque si lo que preferimos es una zona en la que desconectar delante de la televisión o perdernos en la trama de algún buen libro, quizás deberíamos apostar por este sillón.

CH1

La voracidad del mercado no deja a nadie indiferente y los fabricantes ya han empezado a fabricar híbridos entre los dos muebles. No resulta nada extraño encontrarse en algunas tiendas sofás de dos, tres o más plazas que son reclinables, para que la persona que lo use pueda estirar las piernas y tumbarse como si de una chaiselonge se tratase. La funcionalidad de este mueble en este caso puede quedar en entredicho ya que puede significar que otra gente no pueda tumbarse, si el principal uso que le damos es el de área de descanso.

¿Y tú qué prefieres?